La preparación para un torneo tan importante como el evento principal de las WSOP es diferente a la de cualquier otro.
Un torneo de la dureza del main event de las Wold Series of Poker, con un gran número de horas por día, un gran número de días consecutivos de juego y el cansancio mental de estar ante los mejores jugadores del mundo en el torneo más importante del año, requiere una preparación especial.
El sueco Ken Lennaárd, uno de los blogueros más conocidos del mundo, en su colaboración con PokerListings te ayuda (en su peculiar estilo) a ponerte a punto para el evento principal de las World Series of Poker 2015.
El evento principal de las WSOP es una maratón en la que te encontrarás multitud de obstáculos que pondrán a prueba tu salud mental, tu serenidad y tu zen.
Si no puedes pasar página tras un bad beat contra alguno de los jugadores que realizan apuestas sin pensar, no tienes opción alguna de ganar nada.
Si una mala jugada te bloquea y perjudica tu juego al no olvidar la acción según se vuelven a repartir las cartas, tus opciones de ganar son cero. Siempre y cuando no seas tú el jugador sin cabeza afortunado, aunque en este caso no estarías leyendo este blog.
El torneo te chupará toda la sangre
Yo recomiendo encarecidamente tomarse unos días libres antes de este mastodóntico desafío.
Necesitas recargar tus baterías ya que necesitarás toda la energía que hayas podido acumular para caminar por el largo camino (si todo va bien) y varios días de acción sin descanso hasta alcanzar un gran resultado.
Incluso si juegas como una auténtica roca, tu energía irá disminuyendo hasta quedarte sin fuerzas, esta es la naturaleza de la bestia (tal como llama Lennaárd al main event).
El significado de un torneo tan importante, el precio del buy-in, el tamaño de los stacks, la magnitud del acontecimiento, tus propios sueños,... Todo eso irá chupándote la sangre poco a poco hasta dejarte sin energías.
Los mejores jugadores del mundo que juegan alguna gran partida de cash el día anterior no tienen opción alguna de ganar. Aquellos que hacen esto y juegan grandes partidas, ya sea de cash o torneos, tienen tan solo una oportunidad mínima de alcanzar el segundo día.
Deberías haber jugado un gran número de torneos en el último par de meses, pero ahora sería demasiado tarde.
Lo mejor que puedes hacer antes de comenzar a disputar el main event de las World Series of Poker es tomarte un par de días de descanso para recuperar energías.
Como verduras y frutas, haz yoga o ve a nadar, ve a darte un masaje. Haz algo que no tenga ninguna relación con el juego ni con el poker.
Un año me fui a ver a Celine Dion
He jugado 14 eventos principales de las WSOP. Aquellos que he jugado sin la preparación adecuada no han ido nada bien. Aquellos que preparé de la forma correcta, al menos los jugué bien.
Tomé como tradición ir a ver el Circo del Sol la noche de antes de comenzar el gran torneo del año. Este hecho me pone de buen humor, además de con la actitud correcta para combinar fantasía y creatividad.
Mystère es mi favorito, creo que lo he visto siete veces.
Aunque un año, en lugar de ir al Circo del Sol, decidí ir a ver a Celine Dion. Creo que fue en 2005. Entre los miles de personas que había allí, pusieron el foco en T.J. Cloutier y su mujer, los cuales estaban entre el público.
Tomé esto como una señal de que sería campeón del mundo. La lógica de relacionar ambos hechos quizá no sea la más acertada, pero no hay nada malo en inventar “señales” que me traerán buenas cosas. Todo lo que ponga tu mente en un punto positivo para afrontar el torneo es algo bueno.
Ivey no puede foldear pareja de reinas
Lo que más me gusta para preparar el evento principal de las WSOP es apartarme del ruido, luces y acción del Rio y de los casinos de la famosa Strip.
He ido a pescar. Incluso no me dejaron pescar por no tener licencia, pero aun así yo era feliz. He hecho rafting en el río Colorado, incluso he ido en bote al otro lado de la presa Hoover en el lago Mead.
La mejor preparación la hice en 2003. Fui a Las Vegas y estuve jugando pequeños torneos diarios durante dos meses antes de disputar las Series. Después de esto, antes del evento principal, me fui a la naturaleza.
Fue mi mejor participación en el main event, finalizando en la 34ª posición y siendo eliminado por Phil Ivey, quien estuvo pensando durante largo tiempo qué hacer, pero al final no fue capaz de foldear sus reinas pre-flop.
Una pena ya que yo tenía Q-7.
Pagué y me fui como un buen joven sueco
Estaba hablando de la naturaleza. Necesitaba un corte de pelo, pero mi estilo era afeitado y no quería invertir mucho tiempo.
Vi en la autopista un cartel que decía “cortes” (o algo parecido) y que parecía prometedor.
Las dos mujeres que había allí estuvieron “de cháchara” hablando sobre todo tipo de estereotipos típicos de sí mismas, mientras una de ellas me cortaba el pelo a máquina.
Esa conversación sin sustancia alguna es probablemente la razón por la que no estaba atendiendo a mi cabeza y por la que me cortó la oreja con la maquinilla.
Me hizo un buen corte en la parte alta de la oreja y esta empezó a borbotear sangre que descendía hasta mi cuello. Ella dijo “lo siento” y me dio una tirita. Le pagué y me fui como hacen los jóvenes y educados niños buenos suecos.
Conduje hasta el Monte Charleston para escalar en las montañas. Un árbol solitario en la cima, el cual se dice que lleva ahí más de 3.000 años, me inspiró.
Imaginé cuánto viento, lluvia, heladas y todo tipo de miserias ha tenido que sufrir. Era fuerte como una roca y se convirtió en un símbolo para mí, así como para mi camino al brazalete de campeón, o eso pensaba al menos. La inspiración es buena siempre, ¿lo recuerdas?
Dormía en un lugar similar al que aparece en la película “El resplandor”.
Cené en un restaurante con capacidad para 300 personas, creo que había otro cliente en la otra punta de la sala, pero quizá era tan solo un animal salvaje o algo escapando del frigorífico.
Una sonrisa apareció en mi cara
Cuando había terminado la cena miré a mi vaso vacío de cola light. Encima de uno de los hielos descansaba (eternamente) una mosca muerta.
Debía estar muerta ya que nunca antes había visto una mosca durmiendo sobre su espalda.
Cuando el camarero apareció de nuevo y le señalé el vaso, me miró como si le hubiese insultado gravemente.
No me enfadé. Pagué la cuenta y di propina como hace un buen joven sueco.
Una sonrisa apareció en mi cara, sabía que estaba preparado para comenzar el evento principal de las World Series of Poker.
